Receta
1.
Corta las pechugas de pollo por la mitad a lo ancho. Sazona ambos lados con la sal y la pimienta.
2.
Echa aceite de oliva en una sartén grande y ponla a fuego medio. Cuando el aceite esté caliente, echa el pollo y cocina las pechugas entre 3 y 4 minutos o hasta que estén doradas y bien hechas. Cuando estén hechas, sácalas de la sartén.
3.
Después, echa los champiñones laminados a la sartén, sube el fuego y rehoga los champiñones entre 4 y 6 minutos hasta que estén bien dorados. Aparta los champiñones a un lado de la sartén y, en el otro lado, echa los guisantes, el ajo y una cucharada de mantequilla. Remueve la mezcla y rehógala durante 1 minuto. A continuación, mézclala con los champiñones y remueve todo.
4.
Añade vino blanco a la sartén y cocina todo a fuego alto hasta que se haya evaporado casi todo el vino.
5.
Retira la sartén del fuego y echa el tomillo fresco.
Ingredientes
Para 4 raciones
400 g
de pechuga de pollo
500 g
de champiñones blancos laminados
100 g
de guisantes frescos
1/2
diente de ajo picado
4
cucharaditas de AOVE
1
cucharadita de mantequilla
Sal y pimienta al gusto
50 ml
de vino blanco
1 cucharadita
de tomillo fresco
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